jueves, 1 de septiembre de 2011

triste atardecer

No se si será porque el cielo está gris,porque se acaba el verano, porque esta lloviendo... o porque mi casa se ha quedado vacía después de la temporada estival.
El caso es que estoy sentada en la terraza divisando el mar, con una playa desierta, adornada por rayos luminosos que de vez en cuando abren el cielo y a los pocos segundos lo sacuden con un rugido un tanto desagradable. A mi me gusta más oir la tormenta y ver llover a través de un cristal, teniendo una chimenea cerca y un ambiente cálido...las tormentas de verano me resulta atípicas y fuera de lugar. Que horror!!
En fin, que la tarde se presenta triste, y he decidido respirar un poco de aire de mi sur, para tratar de refrescar esta tristeza.
Y está claro que en este estado de ánimo, afloran sentimientos y matices, sensaciones y emociones, cualidades u opiniones, que normalmente no suelen aparecer en circunstacias normales.
Y es curioso, que mientras más triste estoy o mientras más abajo me encuentro, menos pienso en mi misma y más en los demás.
Estoy a punto de coger mis vacaciones. Tengo pensado, como siempre, irme al pueblo a pasar estos días con mi niño,mi gente, mis amigos, mi familia...
Son días de alegría y de fiestas en Ubrique y los voy a disfrutar como a mi me gusta.

Creo que pensando en mañana, que estoy segura de que saldrá el sol, me tranquiliza y se enmascara un poco la tristeza de esta rara tarde de final de verano.



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