martes, 20 de mayo de 2008

Al sur del invierno


Querida desconocida:

Aprovecho estas líneas para decirle simple y llanamente que la quiero.Y no vaya usted a pensar que hablo de un amor fraternal hacia todos los seres de este mundo,y en él también le incluyo a usted.No! Categóricamente no! No se trata de eso,hablo de un amor de diferente índole,hablo de ese amor que atora gargantas y debilita rodillas,el extraño y mariposoestomacal amor que anhela el ser humano-sin saber por qué-desde que es ser humano.Le escribo para confesárselo:

Estoy enamorado de usted;enamorado de su forma optimista y espontánea de tomarse la vida,enamorado de su capacidad para disfrutar de la madre naturaleza sin desdeñar una hermosa mañana callejeando la ciudad bajo la lluvia suave.Qué decir de ese carácter aventurero y tolerante que le permite disfrutar,tanto de un hotel de cinco estrellas en Cancún como de una humilde choza perdida en la India.Enamorado, profundamente enamorado de su innata amabilidad y su falta de prejuiciosa la hora de relacionarse con otros seres humanos,pero sobre todo, sobre todo,enamorado de la forma sincera, sencilla y valiente que tiene usted de quererme: Sin reservas, mostrándose tal y como es;vestida de noche o cubierta de harapos, pero tal y como es. Por todo ello, quiero que sepa que la quiero,que siempre la quise, y que siempre la querré.

Sin más, reciba mi más sincera sonrisa.


Al sur del invierno.



lunes, 5 de mayo de 2008

Almacén de Sensaciones


Este escrito...merece estar en mi Sur.


Era un día de esos que el agua de lluvia invade hasta los resquicios más insospechados, allá por un mes cualquiera de invierno, un día de esos que incitan a sentarse delante de la chimenea y mantener una conversación mientras se van quemando los troncos de la encina vieja, en una candela que adorna la habitación con su saber estar.
El Conocimiento, sentado en una vieja mecedora, ya peinaba canas y sostenía sobres sus manos un antiguo libro. A su lado, tumbada en el suelo sobre una alfombra, se encontraba la Ignorancia, con la juventud reflejada en su cara y ajena a todo lo iba a acontecer esa tarde.
De repente, cuando más apretaba la lluvia y los cristales se empapaban del vapor que la cálida habitación poseía... el Conocimiento cerró su libro, lo dejó descansar sobre sus piernas y le habló a la Ignorancia.
-Querida Ignorancia, hoy es un día especial para nosotros. Hoy te voy a dar la llave. Quisiera que te acercaras al antiguo armario que preside esta salita y abrieras sus puertas.
La Ignorancia, loca de alegría porque estaba a punto de abrir aquel armario que tantas veces tuvo ganas de descubrir, se levantó de un salto y con alegría e ilusión tomó en sus manos la llave.
Era un armario inmenso, de esos antiguos que decoran las casas de pueblo. Un armario con madera vieja, pero bien cuidado. La Ignorancia se dispuso a introducir la llave por la cerradura un tanto oxidada...cuando oyó la tranquila voz del Conocimiento que le dijo;
-Lo que hay dentro de ese armario es el mayor tesoro que tengo. Se encuentra en ese “almacén de sensaciones” desde hace muchos años, y ha llegado el momento de que llegué a tus manos.
La Ignorancia le miró y mientras metía la llave sonrió...
-Debe ser muy importante lo que guardas aquí, porque han sido muchos años los que ha permanecido cerrado este armario. Tengo un poco de miedo a abrirlo.
-Ábrelo, estoy seguro de que ya estás preparada para conocerlo-dijo el Conocimiento, mirando la estampa de la Virgen del Rocío y haciéndole un guiño.
El almacén de sensaciones se abrió de la mano de la Ignorancia y un perfume delicioso inundó el sentir de esta... que por primera vez, iba a ser partícipe de algo maravilloso.
Olía a romero, olía a tierra mojada por el rocío del amanecer, se podía sentir el color de las marismas, se notaba el frescor de las amapolas y los lirios del campo, hasta el sudor de los bueyes y el crujir de las carretas...
El armario era profundo y amplio, pero estaba vacío. La Ignorancia pudo divisar al fondo, una vara apoyada sobre uno de los lados, de la que colgaba una vieja medalla con un cordón deshilachado y sucio, y al lado de la vara,unas zapatillas de esparto.
El Conocimiento invitó a la Ignorancia a que cogiera la vara, se pusiera la medalla y las zapatillas, y se sentara delante del armario, pero que no cerrara las puertas, para que olor le fuera impregnando mientras le contaba aquello que tantas ganas tuvo de contarle, y que nunca fue capaz., porque no había llegado el momento.
-Cuántas veces te he invitado a que me acompañaras a caminar,....-suspiró el Conocimiento- cuantas veces te dije que te vinieras con nosotros, que el Rocío hay que conocerlo de otra manera. Cuántas veces me negaste caminar y cuantísimas veces me he ido detrás del simpecado dejándote atrás.
La Ignorancia le miraba con los ojos llenos de lágrimas... no daba crédito a la cantidad de sensaciones que estaba experimentando sentada delante del armario....
El Conocimiento continuo hablando;
-Hoy vamos caminar. Hoy que es invierno y que llueve, vamos a caminar hacia Ella, para que por medio de mis recuerdos y mis vivencias te empapes de Rocío. Yo lo necesito y creo que tu ya estás preparada. Ella me lo ha susurrado.

Y se fundieron en un camino soñado, delante de aquel armario de sensaciones y de vivencias, y se abrazaron mientras soñaban con el día de hacer realidad su camino juntos, y se volvían a regocijar en el olor de la marisma....
Y se despertaron al compás de un tamboril, y escucharon misa, y rezaron el Ángelus, y pararon para tomar agua y comer algo....y siguieron caminando juntos, y encendieron dos velas al Simpecado que acompañaban, y rezaron el Rosario, y cantaron la Salve....y después entonaron rezos por sevillanas a la Señora...El Conocimiento tocaba la guitarra, la Ignorancia le acompañaba con su voz rajada....junto a la candela, en una mágica noche dónde los sueños se hicieron realidad....donde el Conocimiento ayudó a la Ignorancia a descubrir, a valorar, a apreciar, a conocer, a vivir......un camino. Su camino y que a partir de aquel día lo recorrerían juntos cada año.

El Conocimiento tuvo oportunidad en aquel primer camino, de transmitir su sabiduría e impregnar a la Ignorancia, de la pureza y la bondad de un alma, que tan sólo vive y sueña con el amor a María Santísima del Rocío.

A todos aquellos amigos que la Virgen puso en mi camino a través de esta Bendita Pantalla y que con “ su conocimiento” han ayudado y ayudan a “ mi ignorancia” a hacer el camino cada día, respirando Rocío, sintiendo Rocío, viviendo Rocío.... que incrementan mi Fe y mi Amor por Ella y que me enseñan a ser mejor persona. A ser rociera.
Gracias de todo corazón.



canción del día

Compartir


Una dosis de cordura
Una cucharadita de entendimiento
Una pizca de generosidad
Un poquito de tolerancia
Un toquecito de autoestima
Un trocito de seguridad
Una porción de fortaleza
Un leve toque de picardía
Una gran parte de madurez
Un resquicio de saber estar
Un cuartito de libertad
Un poco de ironía
Un sin fin de ilusiones
Una inmensidad de buen humor
Una eternidad de sonrisas
Un infinito de sensaciones
Una gran cantidad de complicidad