domingo, 3 de septiembre de 2017

Observando los detalles

Funanbulista
Sinceramente,en estos momentos, y no sé por qué motivo... me parece una palabra de connotación negativa ( está claro que depende de quien la perciba y con el punto de vista que se perciba....y por supuesto que también depende de quien la formule y con la intención que se formule)
Es curioso, porque en lugar de captar el concepto, como término que indica hacer equilibrio... yo lo he percibido como " estar en la cuerda floja"- de ahí el carácter negativo al que me refería.

Cuando se está ahí arriba, sobre el alambre, y en esa tesitura, supongo que es bastante duro tomar decisiones, porque tienes todos los sentidos enfocados a no perder el equilibrio, a no cometer ningún error, y a tratar de avanzar dando pasos pequeños, pero firmes, para no pisar en falso y caer al vacío.
Precisamente por eso, las decisiones si se toman estando en la cuerda floja, pueden quizás ser inadecuadas o no acertadas, por lo que no es bueno precipitarse ni adelantar acontecimientos, hasta que no se llegue al otro extremo de la cuerda, que estoy segura de que se llegará, despacio...pero se llegará.
Me niego a imaginarme que caerás al vacío, sin haber luchado una vez más por alcanzar la meta, llegando al otro lado.
Supongo que a medida que avanzas, un mar de dudas te inunda, es lo normal. 
Sentirás el miedo aterrador de imaginar en algún momento que caes, y que justo debajo no hay nada que te amortigüe la caída, debe ser jodido.

Yo sin embargo, caí, llegué al suelo, me hice daño, me quise hundir un poco más de lo que estaba para poder encontrar ese equilibrio que en mi caso, lo alcancé estando abajo y casi hundida... ya que fue el determinante para coger todo el impulso que me hacía falta, sacar la cabeza, salir de nuevo al exterior y resurgir como el ave fénix.
Para eso se  necesita fuerza y confianza en uno mismo.
Ser consciente de que se puede caer, y aunque la caída sea libre y no se tenga el colchón debajo para amortiguarla, llegar a ser capaz de asumir y aceptar que si llega el momento de pisar en falso y caer, vas a ser capaz y muy capaz de levantarte, a pesar de que el golpe sea certero y te haga mucho daño.
El daño físico se repara, el del alma es más complicado.Cuesta más, pero también se cura.
El secreto está en creer en ti. Y confiar.

Animo, fuerza, seguridad... y las dos palabras claves más importante.
La Positividad y el Optimismo.
Eliminar el NO  de tu vida y avanzar siempre con determinación y firmeza.

Todo lo demás, ocurrirá cuando tenga que ocurrir.
Mientras tanto, vive!!
Y disfruta, aún haciendo equilibrio, aún estando en la cuerda floja a punto de caer...
Disfruta.





1 comentario:

José Manuel dijo...

Me encanta. Para la gente que caen,y no saben como hacerlo para volver a levantarse seguro que les vendrá de perilla. Lo dicho me encanta.