lunes, 18 de julio de 2016

Ufffff


Cuando un " Ufff " te llega al alma...

Hay veces que recibes esa palabra, bien sea porque te la digan (acompañada de una cara un tanto parecida a la desaprobación) bien sea porque la leas en un mensaje ...  Y Duele!!!!
Duele porque, justo en el momento en el que la percibes, te das cuenta de que la impaciencia te colmó, te jugó una mala pasada y provocó esa reacción de aquel que te escribe o te dice la palabra resoplando. Días tontos de los que te gusta que estén un poco más pendiente de ti, y no comprendes que el otro no tiene tiempo ni de mirarse... cómo te va a mirar a ti!!!!
Cálmate, Mar. Cálmate.



Menos mal que mi forma de ser, me ayuda a rectificar y sobre todo a darme cuenta de que hay " momentos" y "momentos" y no en todos ellos se puede tener disponibilidad.
Ruego disculpes mi insistencia y quizás mi preocupación desmesurada, cuando no recibo respuesta esperada...( hay factores que provocan en mi la impaciencia- ya conocida por todos los que me rodean, como uno de mis principales defectos- )
Pero me levanto, me sacudo....y aprendo. Y aprendo a que el tratar de ser paciente ayuda a provocar situaciones más llevaderas que las que la propia impaciencia llega a crear.

Gracias por darme ejemplo. 

Ahora bien, lo que está claro que si ese Ufff lo recibes o lo interpretas de la forma más sublime que se pueda interpretar, y como muestra de satisfacción personal, agrado, bienestar, placer...

Entonces y sólo entonces...

" cuando quieras, quiero"

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