lunes, 22 de agosto de 2016

La Luna LLena

Me fascina!!!!!!


He tenido la gran suerte estas vacaciones de encontrarla delante de mi, ante la magnitud del oceáno que tenía delante de casa...casi pude tocarla.
Imponiéndose majestuosa, señora de la noche, con un saber estar imposible de igualar, una categoría sublime, y una clase  totalmente envidiable.
Estilosa y coqueta le hizo frente a la adversidad de la noche, ya que el viento y las nubes querían adueñarse de su terreno, pero fue imposible vencerla.
Era la única, ni una estrella le hizo sombra. Solo ella en la oscuridad que por si misma, brilló con luz propia e hizo de la noche una claridad infinita.
Preciosa.
Me sonreía, mientra paseaba cerca del mar con las olas casi rompiendo en mis pies descalzos por la orilla y de vez en cuando le hacía un gesto de complicidad- ella me entiende-
Me identifico tanto con su fortaleza y su seguridad, que hay momentos en los que prefiero cerrar los ojos e imaginarme un atardecer envuelto en la luna, que un claro y soleado amanecer.




Ella ilumina la noche, cuando es completa. Y es sólo entonces cuando mi garra y mi fuerza aumentan de tal manera, que puedo llegar a convertirme en su pupila y velar por la luna llena mientras su ciclo es creciente.
Es evidente que voy a preferir siempre, lo que crece a lo que mengua. En todos los sentidos.

Y sus ciclos y cuartos crecientes, hacen que me llene de fortaleza y optimismo, porque en 29 días,siempre, siempre...eternamente siempre, darán como resultado EL TODO.

Su plenitud, su entereza y su globalidad... me enloquecen.

Lunática?? Quizás, pero con sentido común, comedida, realista y con capacidad de adaptación.
Soñadora? Posiblemente, pero sin dejar que los sueños se conviertan en un condicionante de mi propia realidad.

El próximo plenilunio es en virgo, el 16 de septiembre.
Mi mes, mi madurez, mis 40 años.
La luna llena...y yo.

No hay comentarios: